sábado, septiembre 15, 2007

Nacimiento (cont.)

Saludos,

...[continuá de aqui].

"Sus idas a la casa de la niña atenta no tenían algo en particular, más que se miraban por horas. Al verlos se podría decir que se estaban comunicando por medio de sus ojos. Ninguno de los dos hacía movimiento alguno, pero al terminar de verse, los dos se reían mucho tiempo, para después la niña dormir y el hindú retirarse y perderse en la noche.
Al estar en la casa, nadie lo incomodaba. Sólo le dejaban la comida a un lado, pero nunca la tocaba.
Por las mañanas recetaba y en las tardes, en la hora despierta de la niña, visitaba a la pequeña mujercita.
El forastero estaba perdido cada vez mas veces. Un mercante aseguró que un día lo vió gritando por la calle de los mercantes a horas impropias de griterías. Su mirada se perdía en las hojas, en los vasos, en la espuma de las bebidas alcohólicas. Los cadáveres del callejón pestilente eran revisados mas superfluamente y ya el forastero no tomaba apuntes.

El forastero desapareció un buen día que hacía frío. Duró 5 días en el anonimato y por ninguna parte aparecía. El sexto día apareció de nueva cuenta en la taberna con una sonrisa aún mas luenga de la que había llegado aquel cierto día a la taberna. Sonreía por todo y de todo. A la hora de la comida se paro encima de la mesa, sorprendiendo a todos. Dijo un discurso: 'Amigos de este pueblo. Mi misión ha terminado. Hace 6 días hice el mayor descubrimiento de mi vida. Me retiré para consultar con un sabio conocido mío acerca del descubrimiento.
Me encontraba observando a la pequeña mujer que nació. Ustedes la conocen y han visto como he pasado mis días observándola y como nos terminábamos riendo después de una sesión. La comunicación entre esa mujer y yo fue excesiva y eso que ella aún no habla. Me hizo preguntas y se las respondí. Lo que se dijo entre ella y yo, no lo puedo revelar. Rompería mi juramento Hipocrático. Pero cierto día me acerqué mas a ella y se me reveló algo en sus ojos. Algo que estaba ahí y nadie había visto. Una región del ojo humano. El día de hoy ha nacido una región mas del ojo. Y le pondré en honor de mi ayudante, la niña del ojo.'
El forastero bajó de la mesa y fue aplaudido por mucho rato, aunque la mayoría de las personas no supiera de lo que se refería y para ellos el ojo se formaba por sólo el ojo.
Al terminar de ser aplaudido, el forastero agradeció al pueblo y salió a caminar, para en una esquina desaparecer con la facilidad con la que había aparecido en el pueblo.

FIN
"






P.D. 1 Vengan los gramos!
P.D. 2 Si se perdieron alguno, aqui los links

Arriba y adelante!!!

4 comentarios:

ChavirA dijo...

Ame, adore e idolatre la primera, segunda y tercera parte...pero a esta... algo, algo le falto...

Saludos!

Alejandro Vargas dijo...

Chido Chaville, pues sabe que le faltaría. Me gustaría me dijeran como que sintieron que faltó.

Gracias!

Ån€iëNt §Öû£ dijo...

el tiempo es lo que hace al vino saber tan bien.

Alejandro Vargas dijo...

:) merci beaucoup.